Consecuencias de la falta de higiene personal
La
higiene personal incluye todas las rutinas diarias que ayudan a
mantener tu cuerpo limpio. Esto incluye hábitos saludables regulares de
cepillarte los dientes, lavarte el pelo, lavarte las manos, limpiar tu
cuerpo con agua y jabón, usar desodorante cuando sea posible y mantener
tu ropa limpia. Cuando las personas no aprenden estos hábitos, o los
omiten, pueden desarrollarse ciertas consecuencias que van desde
problemas sociales a enfermedades potencialmente graves.
Olor del cuerpo
Una
de las primeras y más prominentes consecuencias de la falta de higiene
es el olor corporal. Esto ocurre debido a la interacción de las
bacterias y el sudor producido por las glándulas apocrinas. Como las
bacterias prosperan en el sudor sin lavar, con el tiempo producen el
olor comúnmente asociado con el olor corporal. El olor corporal también
puede provenir de malos hábitos en el baño, lo que resulta en el olor de
las heces o la orina.
Mal aliento
El
mal aliento resulta una consecuencia más fácilmente reconocible de la
falta de higiene. Comúnmente se desarrolla a partir de no cepillarse ni
limpiarse con hilo dental regularmente. El mal aliento se forma debido a
dos razones principales. En primer lugar, las bacterias prosperan en
las partículas de alimentos que se pegan a los dientes. Como las
bacterias digieren la comida, sus subproductos resultan en mal olor. Los
alimentos también pueden quedar atrapados en los dientes y pudrirse con
el tiempo, produciendo un olor fétido, de acuerdo con la American
Dental Association.
Enfermedades dentales
No
sólo la falta de higiene dental causa mal aliento, también puede
conducir a la enfermedad dental. Al permitir que las partículas de
alimentos y bacterias se acumulen en los dientes, comienza a formarse
una capa llamada placa. Las bacterias de la placa liberan ácidos, que
rompen el esmalte de los dientes. A medida que este proceso continúa en
el tiempo, una sustancia dura llamada cálculo puede formarse en los
dientes, irritando las encías que los rodean. Esta irritación puede
progresar a gingivitis, lo que lleva a la inflamación de las encías, que
posteriormente puede conducir a la enfermedad de las encías. La
enfermedad de las encías causa infecciones, y con el tiempo puede
destruir los dientes.
Enfermedad general
Las
prácticas de higiene, como lavarse las manos, son las maneras más
eficaces de prevenir las enfermedades y su propagación, de acuerdo con
la Clínica Mayo y el Center for Disease Control and Prevention (CDC).
Tus manos están en constante contacto con el medio ambiente y tu cara,
lo que facilita el transporte de la superficie de un objeto o persona
infectada, a tu nariz o boca. Lavarse las manos con agua limpia y jabón
ayuda a reducir la cantidad de bacterias en la piel, lo que reduce la
probabilidad de contraer enfermedades como el resfriado común, la
influenza (gripe), salmonelosis, hepatitis A, la fiebre tifoidea,
estreptococos y las infecciones por estafilococos.
0 comentarios:
Publicar un comentario